La
OMS recomienda consumir unos 400 gramos de frutas y hortalizas cada día como
ayuda inestimable para prevenir enfermedades crónicas, incluyendo las
cardiovasculares, el cáncer, la diabetes tipo 2 y la obesidad; aproximadamente
2-3 piezas de fruta al día y 1-2 raciones de verduras. Una
de estas raciones de frutas ha de ser un cítrico y una de las raciones de verduras ha de ser cruda.
- Las frutas, es mejor comerlas solas, sobre todos las que tienen mucho agua, como la
sandía o el melón, porque diluyen las ácidos del estómago y dificultan las
digestiones, aunque se pueden comer como postre ya que hay algunas como al piña
que mejoran la digestión.
- Preferiblemente deben consumirse crudas para
preservar sus vitaminas y minerales, siempre que no necesiten un cocinado previo, como la patata.
- Se recomienda comer la fruta entera y fresca, evitando las frutas enlatadas y
demasiado edulcoradas.
- Los productos de temporada son más asequibles económicamente,
además de tener mejor calidad.
-
Si cocinas las verduras, hazlo al vapor o con poco agua, de esta forma la
pérdida de antioxidantes se reducirá.
-
Se pueden tomar zumos de frutas para desayunar, ya que son fáciles de ingerir
al estar en forma líquida y se absorben más rápidamente, por lo que nos aportan
las vitaminas y minerales más rápidamente.
-
Las frutas se deben tomar en su punto justo de maduración, para que aporte
todas las propiedades que contienen.
-
No hay que dejarse llevar sólo por el tamaño o el aspecto, no siempre indican
calidad o buen sabor.
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